Tortura: Una Mirada hacia una Práctica Atroz
La historia de la tortura es una narrativa que ha dejado huella como el lado oscuro de la humanidad. Desde la antigüedad hasta los tiempos modernos, la tortura ha sido empleada como un instrumento de poder, castigo y coerción.
La práctica de la tortura se remonta a la antigüedad, donde se utilizaba como un medio de castigo y control social. Desde los crueles métodos empleados por los romanos hasta las atrocidades cometidas durante la Inquisición, la tortura ha sido una constante a lo largo de la historia. Durante la Edad Media, alcanzó su punto máximo de brutalidad, con instrumentos diseñados para infligir sufrimiento extremo y obtener confesiones.
En muchas culturas antiguas, se empleaban métodos brutales de tortura como la crucifixión, la flagelación, el aplastamiento de miembros y la quema.
Aquí debemos enfatizar que la tortura no ha sido desde luego una praćtica exclusiva de grupos "primitivos y salvajes" como se ha dicho, aunque es lógico que en sí misma, la tortura no se refiere a una actividad muy civilizada desde luego.
En ocasiones se confunde el sacrificio con la tortura, el primero de alguna manera y a pesar de su brutalidad, tiene una connotación mística y religiosa, mientras que la tortura es más un acto de cobardía con la que se busca que la víctima confiese alguna culpa o revele información en beneficio de su verdugo.
Podemos ejemplificarlo en el caso del famoso tormento al que fue sometido el último tlatoani azteca, Cuauhtémoc, a quien se le unta manteca en los pies para después quemarlos a fuego lento con la finalidad de que confesara la ubicación del oro que los antiguos españoles, comandados por Hernán Cortés, querían robar cual viles delincuentes de barrio.
Porque se cuestiona mucho y se escandalizan cuando se habla de sacrificios humanos y "guerras floridas" de los antiguos mexicas, descritas por los propios historiadores españoles, pero tampoco se pueden olvidar las atrocidades que se llevaron a cabo con las torturas de la "Santa Inquisición" en donde se echó a volar la imaginación creando toda clase de herramientas e instrumentos de tortura que hacen ver a la saga "Saw" como cosa de niños.
Pero no se trata de juzgar nacionalidades, hay torturadores y asesinos en todas partes del mundo así como mentes enfermas capaces de matar lentamente de mil maneras, tal y como lo hemos visto en Mentes Asesinas. Lo importante sería unir ese ingenio y ese ímpetu para hacer el bien sin importar si eres mexicano, español o chino. Hay peores verdugos en la cúpula de la élite que tras las sombras se encargan de asesinar no a unos cuantos sino a millones de personas inocentes.
Al igual que con nuestro podcast Mentes Asesinas, no se trata de explotar el morbo sino de tomar conciencia sobre el lado oscuro de la humanidad que a veces creo que está impulsado por entidades que pasan inadvertidas para nuestros sentidos. Por ello, penetraremos brevemente en este y varios artículos en la historia de la tortura.
Pero sigamos...
Durante la Edad Media, la tortura se convirtió en un método común de obtener confesiones y castigar a los acusados de crímenes. Se desarrollaron instrumentos de tortura especializados, como la doncella de hierro, el potro y el tormento de agua, para infligir sufrimiento físico extremo.
En tiempos de la Inquisición en Europa (siglos XII-XVIII), se utilizaron técnicas de tortura para obtener confesiones de herejía y otras supuestas transgresiones religiosas. La tortura se utilizó como un medio para reforzar el control de la Iglesia y mantener la ortodoxia religiosa.
Durante siglos, la tortura fue una práctica común en los sistemas de justicia criminal en todo el mundo. Se creía que la tortura era un medio efectivo para obtener confesiones y castigar a los criminales, a pesar de su falta de fiabilidad y humanidad.
Ya con el advenimiento de la Ilustración y los movimientos de derechos humanos, hubo un impulso para abolir la tortura, que incluso se llegó a practicar legalmente . Sin embargo, siguió siendo una práctica común en muchos países, especialmente durante períodos de conflicto y represión política. La Segunda Guerra Mundial y sus horrores arrojaron luz sobre la crueldad de la tortura a una escala global.
En el siglo XX, la tortura fue prohibida por numerosos tratados y convenciones internacionales, incluida la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes de las Naciones Unidas, adoptada en 1984.
Justamente durante los años 80 se sabía sobre los métodos de tortura empleados por la policía judicial en México como el famoso "pocito", que consistía en meter la cabeza de la víctima en un depósito de agua por varios segundos y repetir hasta hacerlo confesar. Otro método muy conocido de aquellos tiempos era el "tehuacanazo", que consistía en agitar una botella con agua mineral gasificada a la que previamente se le agregaba un poco de jabón detergente para después introducir por la nariz de la víctima causando fuerte irritación y dolor.
Y bueno, las leyes existen, entre otras cosas para que la sociedad no se pierda en el crimen, ahora imaginemos si no existieran. Porque aunque en nuestro días la tortura está prohibida, no podemos cerrar los ojos ante los brutales métodos empleados por el crimen organizado o por la milicia en todo el mundo.
Ya tendremos tiempo para profundizar en este macabro y oscuro viaje por la historia de la tortura en próximas entregas.